Posts

Showing posts from November 1, 2009

Los misterios del Barrio Bellavista

Las luces, la música, la muchedumbre invaden las calles de Bellavista, hasta hace unos años bello y tranquilo barrio habitacional, de grandes y hermosas casas y mansiones, de cites y pequeños condominios del 1900. Hoy humedecido en alcohol, aromatizado en yerba, ante las pisadas y la danza de los concurrentes, de bares, restaurantes, pubs y discotecas; crujen sus raíces, bajo el asfalto que cubre el empedrado que hermoseaba sus antiguas y bellas calzadas. Cuando disminuye el ruido y avanzada la noche, el barrio se invade de misterio, las luces se atenúan y se cubre de penumbra el cielo al alcanzar el alba. A esa hora, algunas veces, se escucha el sonido de las ruedas de un carretón desplazando por el camino de piedras, en dirección a Dardignac con Mallinckrodt, al fondo se siente voces de niños jugando y durante el trayecto, a lo lejos, lamentos y ladridos furiosos. Cuando esto ocurre se dice que alguien desparecerá. Entre las historias del barrio esta la de las monjas de un Colegio de

Toma por mi

Querido compadre, ¿Como están tus diez días sin tomar? ¿Te acuerdas que ayer, para el día del amor, me dijiste que no podías tomar? Te cuento que para celebrar el día del amor, salimos con mi señora a comer al restaurante italiano de Juan, un amigo peruano. Estuvo excelente, fíjate que había un mozo muy simpático que de repente, contaba anécdotas a los comensales, estaba también una pareja un poco extraña, porque él era invisible, ella le leía poemas y le conversaba, después el la saco a bailar y ahí cache que era alto, aunque no lo veía, en todo caso el garzón (como lo llamaba ella) si lo veía porque en un momento se sentó a conversar con el hombre. Lo pasamos muy bien, quizás uno de los mejores días del amor. La cena era excelente y claro, nos tomamos un pisco sour, dos copas de vino tinto exquisito y de bajativo un araucano. Por supuesto me acorde que me pediste que tomara por ti, así que fue un pisco sour mas, dos copas de vino mas y un araucano mas. Todo estaba del uno ¿o del dos?

La preciosa jovencita

Y ahi esta la preciosa jovencita, al darme cuenta la miro, ¡le hago señas al tiro!; no me infla, se sabe bonita, La busco agitando mis manos, golpeo la ventana dando un ruido fuerte, no me mira y la observo sonriente, ella se da cuenta, pero que voltee es en vano. El bus comienza a avanzar. Instalada en el paradero, ¡golpeo la ventana con el monedero!, pero no consigo su atención prestar. No da vuelta la cabeza, a pesar que se ha puesto colorada. El bus avanza quedando alejada, de a poco pierdo su belleza. La preciosa jovencita, en la esquina, con su desplante intacto, sin mirarme siquiera, con su bolso encima y mas atras el disco compacto que hace poco se le cayo en la acera.